Old school V/S Nueva escuela

Old school V/S Nueva escuela

En la sociedad contemporánea, los jóvenes tienden a buscar modas y grupos con los cuales sentirse identificados para lograr un sentimiento de pertenencia. Los medios de comunicación, principalmente la televisión, influyen de manera decisiva en el estilo que tomarán los adolescentes en su juventud, para así encontrar un grupo urbano, o underground con el cual sientan pertenencia. Es así como nacen los rockeros, hip-hoperos, punkis, y un sinfín de grupos más. Pero dentro de estos grupos, surgen fisuras por pensamientos, edades, o diferentes realidades.

Por Wilson Ahumada

En la década de los 80´, surgió un movimiento musical-artístico llamado Hip-Hop en los barrios más pobres de Nueva York. En un comienzo, el Rap (la música del Hip-Hop) solo fue escuchado en los "guetos", y solo por la población afroamericana de Estados Unidos. Actualmente este género musical recauda faustuosas cifras en venta de discos y mercancía. En Chile, como otros movimientos, el Hip-Hop llegó atrasado a fines de los años 90. El Rap ha ido tomando fuerzas en Chile, mayormente en poblaciones y barrios de clase media.

En un principio, el Hip-Hop fue un movimiento unitario, fraternal y, en cierto modo, solidario. Sus viejos exponentes relatan que en sus letras no había tanto egoísmo, violencia y estupor como hoy. Los seguidores más viejos de este movimiento se declaran Old School, es decir, partidarios del otrora Hip-Hop social. Ellos, sienten vergüenza por los nuevos seguidores del movimiento y los llaman despectivamente Toys (por las siglas en inglés T.O.Y.S.; Trouble In Your System). Por otro lado, los jóvenes del Hip-Hop moderno se autoproclaman new school, y pretende llevar el movimiento a todas las clases sociales, criticando con violencia al sistema y relatando sus vivencias callejeras. Pablo Trigo, llamado "Menta" por sus amigos, pertenece a la Old school. Vive en la población Bonilla, en un pasaje donde las murallas están completamente rayadas, y la música-de todo tipo- se escucha por todos lados, casi no se escucha nada claro en las calles. Para él, la violencia ya pasó de moda, y los jóvenes deberían dar mensajes sociales en las letras de sus canciones.

Alejandro de la Torre, conocido como el "Arsenal", tiene 17 años y pertenece a una crew (grupo o pandilla) de grafiteros New School. “Te diré lo que opino del rap social: que es una mierda, los viejos ya no están ni ahí con criticar a los cuicos como antes”, dice él. En los últimos años, en la Segunda Región se han hecho muchos encuentros Hip-Hop. En estos eventos es donde se puede apreciar la diferencia de pensamientos de los dos grupos. En cada canción, dibujo o baile se nota la fricción entre ambos.

El Menta deja la Bonilla, compra un pasaje de bus y viaja a Calama para encontrarse con viejos amigos con los que pintaba murallas y cantaba. En la ciudad minera, se encuentra con algunos amigos veinteañeros para organizar un nuevo encuentro Hip-Hop. Caminando por las calurosas calles, pasa por una plaza en la cual hay varios jóvenes cantando como Rap en un semicírculo. “¡Viejo perro!”, le gritan. “¡Pendejo yanqui!”, responde Pablo. “Estos Toys no tienen respeto, antes le hubiéramos pegados a todos estos cabros chicos, pero ahora nosotros somos los que llevamos el Hip-Hop como enseñanza y no podemos hacer eso”, explica Pablo.

Otro punto en el cual difieren ambos grupos, es en la devoción que hacen los New School hacía la cultura puertorriqueña, en especial, al reggaetón. “El Hip-Hop no se mezcla, no se toca en la radio y sirve para mandar mensajes sociales”, dice el " Menta".

Auxiliado por la complicidad de la noche, el "Arsenal" saca lentamente de su mochila una bolsa con pintura en polvo. Otro integrante de su crew se acerca y mezcla la pintura con agua en un tarro. Dos jóvenes sacan anchas brochas de sus bolsillos y empiezan a pintar un muro de blanco. Mientras ellos avanzan, el Arsenal va pintando con una lata de pintura negra varias líneas. Poco a poco aparecen letras y dibujos . El último de los integrantes pinta con dos colores más el dibujo, y en 4 minutos desaparecen de la escena, sin antes sacarse una foto, para conservar en un álbum su reciente obra. “los viejos están organizando unos encuentros de Hip-Hop pa´ el verano, pero nosotros le vamo´ a dar paliza en grafiti po´, si nosotros ahora somos mejores que ellos”, dice el "Arsenal" mientras busca otra pared para pintar.

“Nosotros no estamos ni ahí con pelear con los toys, pero igual tienen que entender que así como son, así como se muestran, la gente los discrimina po´, tienen que cambiar para que el Hip-Hop resulte como todos queremos”, dice el "Menta", sentado a altas horas de la noche en la misma plaza que estaban un poco más tempranos los New school. “A esta hora los cabros chicos se van a pintar grafitis sin ni un brillo por ahí”, relata el Menta, “nosotros pintamos de día”, agrega.